lunes, mayo 16

Implicaciones de ser un estudiante profesional de música

1.- Te has olvidado de comer por estar estudiando.



2.- Más de una vez te has enfrentado a los vecinos por estudiar tu instrumento 
hasta altas horas de la noche; ya que no entienden que se acerca un concierto importante.



3.- O al menos tus padres han suplicado que “te vayas a dormir” 
o que te mudes a algún lugar apartado.



4.- Si tienes carro, eres bendito. Si no, te has enfrentado a la gente en el transporte público, 
que te ha recordado a tu bella mamá de mil maneras porque no los dejas pasar con tu “mochila”, “cosa esa”, “estorbo” y en el mejor de los casos, saben que es un instrumento, y aún así les vale.



5.- Si eres flautista, oboísta, o algo por el estilo, no te preocupa el punto anterior, 
pero si tu instrumento es de mayores dimensiones, eso es tu pan de cada día.



6.- Envidias a estudiantes de otras carreras profesionales, 
aquellos que con un cuaderno y una pluma en su mochila sobreviven.



7.- La rabia te carcome por dentro cuando alguien dice ser músico profesional, 
y cuando le preguntas con quién o dónde estudió, te contesta “aprendí solo”.



8.- Más aún cuando ni siquiera sabe que es un Do#, 
mucho menos qué es una séptima de Dominante.



9.- Los ejercicios de Contrapunto te han sacado canas verdes, 
a parte de no haberte dejado dormir un par de noches.



10.- Cuando alguien te menciona la palabra “hueso”, no significa 
una parte del cuerpo humano, significa dinero.



11.- Has dormido (y hasta babeado) en clases como Solfeo, Historia de la Música, 
Contrapunto, Análisis, Acústica, Informática, Estética, Idioma, Conjuntos Corales, Folklor, incluso en Orquesta Sinfónica; pero nunca, NUNCA cabecearás en tu clase de instrumento.



12.- Has visto el amanecer en tu camino a la escuela, y la noche estrellada en 
tu regreso a casa, todo en el mismo día.



13.- Si padeces de insomnio, sabes que lo peor que puedes hacer 
es poner música para intentar dormir… acabarás analizándola en tu mente, ¡y menos podrás dormir!



14.- Los baños de tu escuela son como el de tu casa; 
¿Cuántas veces no te has lavado allí los dientes, el cabello, la cara, las patas…?



15.- “¿Y no piensas estudiar una carrera de verdad?” Si nos dieran una moneda 
cada vez que nos dicen eso, ya tendríamos para pagar la fianza por haber asesinado a todos aquellos quienes nos hicieron esa pregunta.



16.- Ya no te importa que los demás te llamen “matado” por encerrarte 
a estudiar desde las 10 de la mañana hasta las 8 de la noche. Y como dice el punto 1, te olvidas de comer por estudiar; y ni hambre te da.



17.- De hecho, no hay nadie quien te llame "matado"… 
Todos están encerrados estudiando o en clase.



18.- Te has tocado las mañanitas tú mismo en tu cumpleaños.



19.- Tus cuates te han tocado las mañanitas con súper arreglos improvisados, 
en todos los estilos y tonalidades, y con todo tipo de dotaciones e instrumentaciones.



20.- La música en tu celular: 8% - clásica (o docta) 
y 92% - salsa y cumbia, huarachas, reggae, jazz y big band, rock, metal, pop, funk, baladas, temas de caricaturas, los 40 éxitos del momento, música de mundo; en fin, de todo. Pero eso sí, NUNCA Reggaetón.



21.- Te has cansado de explicarle a todo el mundo que la música es una carrera reconocida,
completa, absorbente, pero sobre todo, larga y pesada (pero hermosa); y no es solamente algo para hobbie, como todo mundo cree.



22.- Has tocado en tu instrumento el tema de tu video juego, caricatura 
o película favoritos, o incluso la rola del momento, y todos te idolatran por ello.



23.- Pero si quieres tocar algo de tu repertorio de clase, 
te mandan al diablo, simplemente porque no lo conocen.



24.- ¿Cuántos músicos se necesitan para cambiar un foco? 
R= 101 músicos; 1 para que lo cambie, y 100 para decir cuál de ellos lo hubiera hecho mejor.



25.- Te ríes cuando oyes a los chavos de prepa jactándose 
de “cuánto saben de música”, solo porque saben en qué año se formaron las bandas y por qué se separaron.



26.- La gente cree que la carrera no es pesada, porque simplemente podrías 
dejar de estudiar un rato y no pasa nada; pero no es así: dejas tu instrumento un par de días y todo el esfuerzo y el avance de un par de meses se va a la basura.



27.- Al final de todo, cuando toques y veas que tu público te devuelve una sonrisa a cambio,
sabrás que todo el esfuerzo y sacrificios han valido la pena. ¡Eres un músico!
 
A veces no podrás vivir plenamente tu vida; otras veces tu familia, amigos 
y hasta novi@ pasarán a segundo plano; pero todo se justificará cuando oigas a la gente elogiar tu manera de tocar.


Ser músico es un orgullo que solo pocos podemos levantar. 
Disfrutémoslo, ya que un músico nunca tendrá tiempo para sí mismo; vivimos para nuestro arte…   "Escuchar es creer"

2 comentarios:

  1. hola!
    es verdad eso que escribes sobre las personas que preguntan si no estudiarás algo de "provecho"
    Si en el mundo hubiera un poco más de prioridad para la cultura...la historia sería diferente.
    Saludos!

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  2. Hace poco, por cierta situación, me había hecho la pregunta de que se siente estudiar la carrera de música. Curioso.

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